27 jul 2012

7 días.

Llevaba tiempo sin escribir sobre nosotros, al igual que tú sin poner nuestra canción favorita mientras revisas nuestras fotos. Será por eso de que nos gusta hacernos daño para comprobar si aún nos importamos.
Siete días de prueba amor, siete días en cinco años, hasta esos números tan pequeños me hacen daño, claro, como soy de letras...
Pero en ese tiempo no pudiste soportar el imaginar que mis sábanas olieran a otro, te atemorizaba pensar que acabara de ver en otro sofá o en otro colchón, todas esas películas que nos hemos dejado a medias, esas en las que nosotros mismos inventábamos el final.
De todas las veces que elegiste el camino fácil (o eso creíste) esta fue la más cobarde de todas, la más egoísta. Pero no es tiempo de hacer más sangre, ya solo me queda la cicatriz para recordar lo frágiles que son las promesas.
Al menos  has aprendido a curarme las secuelas que deja tu orgullo. Nunca me creí esa facilidad tuya para tachar recuerdos. Y aquí estamos otra vez, tu y yo por inercia, km0. Tú, siempre buscando el infierno, has elegido quemarte conmigo.
Y ahora continuemos con esto de olvidarnos del resto del mundo, del frío de otros brazos, de lo seco de otros labios. Sigamos con nuestra fotosíntesis particular, yo te ilumino, tú me riegas, nos alimentamos...

4 comentarios:

  1. Me encanta como escribes :) ¿Qué estudias?

    ResponderEliminar
  2. Genial, se echaban de menos tus entradas :)

    ResponderEliminar
  3. Gracias a los dos. Estudio Trabajo Social.

    ResponderEliminar
  4. Siempre han dicho que nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. En ese momento es cuando realmente te das cuenta, cuanto de importante es esa persona para ti. Yo, después de dos años, aun lo estoy pagando.
    Es duro ver como lo que mas has querido y quieres, a pesar de haberlo elegido tu mismo, hace su vida sin ti.
    Es cuando se me viene a la cabeza el un clavo saca a otro clavo... supongo que lo hará, lo que he comprobado es que las cicatrices que deja, nunca las cubre otro.
    Un saludo y un placer recordar mis viejos tiempos con lo que escribes.

    ResponderEliminar

Coge altura. Deja señales.