Una buena forma de volver a vernos sería romperme en tu risa de niño, esa que a pesar de los años sigue sin cambiar. Mismo tono, misma melodía, mismo motivo... Entonces recogerías todos mis pedacitos rotos y explorarías cada matiz, para así triunfante volverme a unir. Siempre te he parecido de cristal, creías que podía estallar en cualquier momento, tenías miedo a soltarme por si acaso me daba contra el suelo.
No hay nada que temer, no tienes por qué extrañarme, vete a tu cuarto, mi silueta sigue sin borrarse de tu colchón. Estás condenado a beberte cada día mi recuerdo hasta que vuelva. Yo sigo aquí, pensando en tu espalda, y acordándome de cuándo aprendimos que el sonido que desprende el bajar de cremallera, puede ser tan perfecto como tu y yo ante un semáforo en rojo.
A veces piensas que en la distancia me vuelvo fría, lo que no sabes es que el hielo también quema. Y si te olvidas de todo esto..., si para que te tropieces conmigo una y otra vez tengo que ser piedra, lo seré.
Me arriesgaré a curarte si te hiero en el intento.
Me encantas sin más
ResponderEliminarQuiero comerme tus moco
ResponderEliminarTe diría quien soy por DM acabo de leer tu tuit, pero esq no me sigues tía.
ResponderEliminarPero sabes q gracias por tener este pedazo de blog. Preciosa por dentro y por fuera.
ResponderEliminarFD V de..